Crítica de cine: “Poltergeist”

 Crítica de cine: “Poltergeist”

Soy de la generación que tuvo la suerte de ver la versión original de “Poltergeist” de 1982 por esos mismos años, por lo que no es difícil hacer el ejercicio de recordar cada escena conforme avanza el filme. Es por esa misma razón que al finalizar esta nueva versión de este clásico de terror, me quedo sentado en la butaca con la palabra “remake” dando vueltas en mi cabeza. Remake. Y surgen muchas preguntas, pero voy a dejar solo esta: ¿Un remake es solo filmar una película basada en la ya existencia de la misma, sin importar el resultado?

La familia Bowen está buscando una nueva casa donde vivir. Llegan a una tranquila villa con sus tres hijos (Kendra, Griffin y la pequeña Madison). Es una casa grande que conforma a todos menos a Griffin, quien inmediatamente capta que las cosas no andan bien. Aparte de la estática que posee la casa, ocurren fenómenos luminosos extraños y espontáneos movimientos de objetos. Una noche en que el matrimonio está cenando en casa de amigos, la casa se pronuncia con fenómenos terroríficos e inexplicables, siendo el más importante de ellos que la pequeña Maddie es absorbida por la casa y queda, literalmente, dentro del televisor, como ventana y reflejo de la nueva dimensión en la que se encuentra. Así, los Bowen contactan primero a expertos en fenómenos extraordinarios de una universidad cercana, para luego requerir los servicios de Carrigan Burke (Jared Harris) para que pueda traer a Maddie de vuelta.

Esta nueva “Poltergeist” no trata de ser original en ningún aspecto, solo que cambiaron los nombres y apellidos con respecto a la anterior. Si bien está actualizada tecnológicamente a los años que corren y la estructura original se mantiene, no es una película que convenza. Es inevitable hacer la comparación con la película original porque ya sabemos que es un remake, por lo que a partir de aquí me parece justo hacer estas comparaciones. Con el filme de 1982 quedan en el espectador muchas cosas en la retina. “Poltergeist” se transformó en algo así como una película de terror para toda la familia. ¿Por qué? Porque aparte de la historia sobrenatural que se estaba contando, tenía elementos que la convertían en una película agradable de ver tanto por sus efectos especiales como por la empatía con la familia misma, en donde cada uno de sus integrantes lograba destacar en sus interpretaciones por lo que son perfectamente reconocibles incluso hasta hoy (a excepción de la actriz que protagonizaba a Dana, la hermana mayor). Y junto con ello no hay duda en que uno de los puntos altos de esa película original es la Medium Tangina que es llamada para hacer regresar a la niña. Tangina era una mujer de baja estatura, contextura gruesa y una voz difícil de olvidar. Era el homólogo del Señor Miyagi en Karate Kid. La Medium se robó la película, adorable e inolvidable. Entonces, existía mucha expectación en conocer cómo sería esa nueva Tangina en este filme. En la versión 2015, la Medium es reemplazada por un tipo que tiene un programa de televisión en donde aparece limpiando de fantasmas casas embrujadas, muy estilo Van Helsing, con sombrero, botas y lleno de cicatrices. La distancia es infinita.

Los personajes de este remake difícilmente quedarán en la retina del espectador. Quizás el que más destaca es el pequeño Griffin, porque es él quien lleva la rienda del filme. Es un niño lleno de temores y aterrado con llegar a esta nueva casa, y con los resultados que todos conocemos. Eric Bowen (Sam Rockwell) está insufrible en el papel de papá estilo “Qué hay de nuevo, viejo?”, la mamá Amy Bowen (Rosemarie DeWitt) no tiene grandes parlamentos como para recordarla en el futuro por este papel, y como excepción la hija mayor Kendra (Saxon Sharbino) eleva bastante el nivel de la película tanto por su actuación como al compararla con Dana del filme de 1982.

“Poltergeist” es dirigida por Gil Kenan, siendo este su tercer filme. Pero no hay que echarle la culpa a él. El guionista David Lindsay-Abaire no supo enfocar la película a algo novedoso, algo que destacara con respecto a la película original. Los personajes son débiles en muchos aspectos, claramente podría haber puesto a otra persona como medium (¿Por qué los mediums de las películas tienen que ser nerds o freaks?) que pudiera acaso competir con la sombra de la gran Tangina. Quizás lo más rescatable del filme son las escenas de esta dimensión en donde se pierde Maddie, imágenes oscuras con flashes rápidos y repetitivos de luz, lleno de almas de muertos buscando el portal para cruzar al mundo de los vivos. Muy bien logrado.

Otra de las cosas que extrañé es la comidilla de aquellos casos paranormales que ocurrieron en la vida real durante el rodaje de Poltergeist de 1982. Los ruidos en el set, los cambios inexplicables de utilería, la enfermedad y muerte de actores y colaboradores. Parece que en esta oportunidad los fantasmas notaron que no ameritaba manifestarse.

Si Ud. no vio la película original puede ver esta sin problemas. Estará pendiente de lo que pasa, pero si lo que busca es asustarse trate de hacer un esfuerzo por lograrlo.

No me penan los fantasmas de esta película, me pena Carol Anne.

 Por ©Daniel Bernal

@BernalusTwit

 

Ficha Técnica:

Título: Poltergeist, juegos diabólicos (Poltergeist)

Director: Gil Kenan

País: EEUU – Canadá

Duración: 95 minutos

Elenco: Kyle Catlett, Sam Rockwell, Rosemarie DeWitt, Jared Harris, Saxon Sharbino, Kennedi Clements, Jane Adams

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